De acuerdo al informe proveído por el Ministerio Público Federal (MPF), la organización criminal comandada por Sergio de Arruda Quintiliano Neto, alias “Minotauro”, tenía su sede en la ciudad brasileña de Ponta Porã, y era la responsable del tráfico internacional de drogas, hecho que fue probado durante el juicio.
La información sobre su implicancia fue obtenida de la extracción de datos de los celulares incautados del poder de Minotauro, durante el procedimiento que derivó en su captura en febrero del año pasado en un departamento lujoso de la ciudad de Camboriú, en el estado de Santa Catarina, sur del Brasil.
Dichos datos confirmaron que la organización enviaba cocaína por valores millonarios al mercado europeo, lo que generó dantescas ganancias monetarias a sus miembros.
La pesquisa también reveló nombres de otros miembros de la banda criminal que realizaban los envíos desde Bolivia a Brasil pasando por territorio paraguayo, para luego ser distribuidos vía aérea o agua a través de contenedores. Para que la carga pueda llegar a destino se pagaban importantes montos de coima a policías y militares.
De acuerdo a las fuentes, Minotauro incluso manejaba la red desde su prisión en Brasil y prueba de ello fue la incautación de un cargamento de 310 kilos de cocaína encontrados el 18 de agosto último en un establecimiento ganadero localizado en la colonia Cerro Cora’i, a unos 20 kilómetros de Pedro Juan Caballero.
Desde allí se enviaba la droga a Europa, a través de puertos brasileños. El grupo delictivo contaba además a su disposición con varias aeronaves y con numerosos pilotos que movían la carga. También con severas penas
Por su parte, su pareja y abogada, María Alcira Cabral Jara, quien también cumplía funciones de líder en la red criminal, fue condenada a 20 años y 10 meses de cárcel, mientras que el piloto Emerson da Silva Lima fue sentenciado a 8 años y 4 meses de reclusión.