En el marco de una operación coordinada, agentes de la Secretaría Nacional Antidrogas (SENAD) y la fiscal Pamela Pérez llevaron a cabo allanamientos simultáneos en diferentes puntos de Pedro Juan Caballero, en el departamento de Amambay. Las intervenciones se centraron en propiedades vinculadas a la familia Marciano Denis Torales, incluyendo una residencia en el barrio Virgen de Caacupé, otra en la fracción Che Jazmín y una estancia rural.
El operativo responde a una investigación sobre una organización criminal con alcance transnacional, la cual fue desarticulada tras meses de trabajo encubierto. Las autoridades detallaron que el grupo utilizaba cargamentos legales de reconocidas firmas exportadoras nacionales para camuflar cocaína con destino a Europa, especialmente a Países Bajos. Se sospecha que contaban con apoyo logístico interno en aeropuertos y puertos nacionales para facilitar los envíos.
Uno de los ejes clave de la investigación fue el acceso a comunicaciones en tiempo real mediante un acuerdo entre la DEA y la empresa Meta, lo que permitió rastrear llamadas y mensajes de WhatsApp de la red delictiva. Gracias a esta herramienta, se identificó a varios miembros de la organización y su infraestructura de contactos.
El grupo estaría directamente relacionado con el decomiso de 976 kilos de cocaína en el aeropuerto internacional Silvio Pettirossi, una carga cuyo destino final era Países Bajos.
El principal sospechoso y señalado como líder de la red criminal es Marciano Denis, quien actualmente es objeto de seguimiento por parte de las autoridades nacionales e internacionales. La investigación sigue en curso, y no se descartan nuevas detenciones en las próximas horas.